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Policía peruana capturó a chofer y copiloto de bus que ultrajaron a azafata

La Policía Nacional del Perú capturó hoy en Lima al chofer y el copiloto de un ómnibus interprovincial que abusaron de la azafata del vehículo el pasado 7 de junio, y habían quedado en libertad por la inacción de una fiscal, lo que generó una ola de rechazo en el país.

El jefe de la Región Policial de Lima, Gastón Rodríguez, informó que la policía capturó nuevamente al chofer Daniel Pérez y el copiloto Marcelino Palacios por orden de un juez de Nasca, que abrió investigación por el asalto sexual de una azafata de 25 años.

La autoridad policial explicó que pondrán a los detenidos a disposición de la policía judicial para que mañana sean llevados ante el fiscal de Nasca, distante a 460 kilómetros al sur de Lima.

Las pericias realizadas por la Policía, tras la denuncia de la víctima, confirmaron que fue dopada antes de ser violentada por sus compañeros de trabajo, agregó Rodríguez.

La mujer y los acusados trabajan en una empresa de transporte interprovincial y el pasado 7 de junio emprendieron un viaje, con pasajeros, desde la ciudad de Arequipa hacia Lima.

Aunque en un principio los acusados admitieron haber abusado de la mujer, tras darle de beber cerveza en pleno viaje, ahora han dicho a la fiscalía que los hechos no se produjeron de esa forma.

"Van a tratar de buscar un subterfugio para minimizar su responsabilidad", manifestó el jefe policial a los periodistas.

Horas después de ocurridos los hechos, la víctima denunció al chofer y al copiloto al llegar a su estación en Lima, pero la fiscal adjunta Karina Toledo que recibió su testimonio dijo que no le correspondía abrir la investigación porque la violación sexual se produjo en la jurisdicción de Nasca, a medio camino entre Arequipa y Lima.

El fiscal de la Nación, Pablo Sánchez, dijo que le desalentaba "muchísimo" la actuación de los fiscales en este caso y dispuso un proceso disciplinario contra Toledo y otros magistrados, que derivó en su separación del cargo.

Sánchez exhortó a los fiscales del Perú a "tomar conciencia del momento que vivimos sobre la violencia contra la mujer. Seamos sensibles y actuemos con corrección en estos casos en especial".

El Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) asumió la defensa legal de la azafata, a la que además brindará ayuda social y psicológica y acompañará hasta Nasca para continuar con las diligencias correspondientes.

A inicios de este mes, el presidente de Perú, Martín Vizcarra, dispuso declarar "de interés nacional y prioridad del Estado" la lucha contra la violencia hacia las mujeres y anunció que se constituirá una comisión de emergencia para enfrentar ese problema.

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FUENTE: EFE