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Piden más sanciones contra Venezuela en una Cumbre de las Américas dedicada a la corrupción

El pedido de Estados Unidos de más sanciones contra el régimen venezolano de Nicolás Maduro opacó este viernes la apertura de la Cumbre de las Américas en Lima, centrada en la corrupción, un tema más bien embarazoso para varios representantes de la región.

La solicitud a sus socios de "más sanciones" para aislar al gobierno de Maduro vino de parte del vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, quien participa de la cumbre, aunque debió abandonar el acto de apertura para ir a su hotel poco antes de que el presidente Donald Trump anunciara los bombardeos contra Siria.

Pence acudió sin embargo más tarde a una cena ofrecida a los mandatarios visitantes por el presidente peruano Martín Vizcarra en el palacio de gobierno.

Durante la jornada, el vicepresidente estadounidense había anunciado una ayuda de 16 millones para cubrir necesidades básicas de venezolanos huidos a Colombia y Brasil por la crisis de su país.

"Estamos con ustedes", dijo Pence al transmitir un mensaje de Trump a un grupo de opositores venezolanos con los que se reunió en Lima.

En la declaración de la cumbre se espera que haya una mención a Venezuela, que el próximo 20 de mayo celebra unas elecciones presidenciales que han sido boicoteadas por parte de la oposición.

En este sentido, el presidente chileno, Sebastián Piñera, cuyo país es uno de los 14 integrantes del Grupo de Lima creado para promover la democracia en Venezuela, pidió que no se reconozca "una elección que no está siguiendo las reglas básicas de una elección democrática".

La VIII Cumbre de las Américas se inició con la notable ausencia de Trump, quien este viernes lanzó ataques militares contra objetivos en Siria, en una acción coordinada con Francia y Reino Unido.

Mientras empezaban los ataques contra "blancos asociados con la capacidad de armas químicas en Siria", en Lima, en la inauguración de la Cumbre, el presidente Vizcarra prometió combatir la corrupción que tumbó hace tres semanas a su predecesor Pedro Pablo Kuczynski, salpicado por la brasileña Odebrecht.

"Cada año, según el Banco Mundial se pierde el 2% del producto bruto interno global en pago de sobornos, lo que aproximadamente asciende a 1,5 billones de dólares; esto es diez veces más de lo que el mundo invierte en asistencia para el desarrollo", recordó Vizcarra, que tiene el difícil desafío de poner fin a esa lacra que ha llevado a la cárcel a dos presidentes peruanos (Alberto Fujimori y Ollanta Humala) y que tiene a otros tres en la mira de la justicia.

De ahí la urgencia de aumentar "la transparencia" en la adjudicación de obras públicas y el financiamiento de los partidos políticos, dijo.

Siete de cada diez ciudadanos del hemisferio tienen poca o ninguna confianza en sus gobiernos y más de la mitad evalúa como malo el desempeño de sus autoridades en la lucha contra la corrupción, afirmó Vizcarra.

Una quincena de mandatarios llegaron a Lima para este cónclave que se hace cada tres años y que esta ocasión quedó deslucido por la ausencia de Trump. Entre ellos, el argentino Mauricio Macri, el mexicano Enrique Peña Nieto, el brasileño Michel Temer y el boliviano Evo Morales.

El ecuatoriano Lenín Moreno tuvo que regresar a su país el jueves por la noche ante el asesinato de un equipo de prensa en la frontera colombiana, que valió la condena de su par colombiano Juan Manuel Santos, quien prometió colaborar con su vecino "para que los responsables de este crimen sean llevados a la justicia".

A punto de entregar el poder el 19 de abril, ni el cubano Raúl Castro ni su más probable sucesor Miguel Díaz-Canel, llegaron y estuvieron representados por el canciller Bruno Rodríguez.

La hija de Donald Trump, Ivanka, trajo un poco de glamour a una cumbre donde se ha discutido hasta la saciedad la inserción de la mujer en la economía regional, pero donde no había ninguna entre los mandatarios.

La joven empresaria y exmodelo anunció en el marco de una Cumbre Empresarial previa a la cita presidencial un plan de 150 millones de dólares para insertar a las mujeres en la economía latinoamericana.

"Por cada dólar que invirtamos, el sector privado movilizará 3 más", dijo la empresaria, que espera alcanzar los 500 millones de dólares para fomentar el "acceso al capital, el trabajo y las oportunidades" de las mujeres.

Ivanka Trump y su marido Jared Kushner forman parte de la delegación estadounidense en la cumbre, liderada por Pence.

La iniciativa de Ivanka Trump se suma al compromiso de ocho multinacionales, con el impulso del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), de capacitar, conectar y certificar a más de 100.000 mujeres de empresas de las Américas para 2021.

Y es que en la época del #Metoo, empresarios, políticos, periodistas y analistas han analizado a lo largo de dos días las formas para incentivar la vocación empresarial de las mujeres en la región que cuenta sólo con un 12% de mujeres en cargos directivos.

El Producto Interno Bruto (PIB) de América Latina crecería en 2.500 millones de dólares si la brecha de género de participación laboral se cerrara completamente, aseguran los organizadores.

FUENTE: AFP